Los derechos humanos de los niños, niñas y adolescentes en los entornos digitales en un contexto global [1]

Por Natalia M. Molina [2]

La oportunidad de participar en ámbitos internacionales siempre es enriquecedor, especialmente porque en el encuentro conviven diferentes culturas con usos y costumbres muy diversos, este encuentro, no ha sido la excepción.

Esta conferencia tuvo lugar al margen de la 75ª sesión Asamblea General de la ONU. La AGNU 2020 fue organizada por la Fundación de Periodistas y Escritores (JWF), en asociación sus socios globales, los Estados miembros de las Naciones Unidas, los órganos de la ONU y las organizaciones de la sociedad civil del mundo.

Así, con el título “Transformando Nuestro Mundo”, “cinco años de acción hacia los ODS”, es que el pasado 23 de septiembre se abrió la conferencia, en la que participaron representantes de alto nivel de los Estados Unidos, miembros de la ONU, las Naciones Unidas y otras organizaciones internacionales, el sector privado, organizaciones de la sociedad civil, defensores de los derechos humanos, periodistas, académicos y diferentes profesionales.

Los paneles tuvieron que ver con diferentes ejes y el encuentro tuvo por objetivo crear una plataforma para que las diversas partes interesadas discutan la Agenda Global 2030.

Me pareció importante compartir las siguientes reflexiones.

Como consecuencia de la pandemia COVID-19, la educación y comunicación online han aumentado drásticamente, lo que ha llevado a la exposición de todos los niños y niñas al ambiente digital y sus peligros. La producción y distribución de contenido de abuso sexual infantil y hostigamiento online es un crimen en muchos países y está creciendo mientras hablamos. Todos esos crímenes tienen lugar en un ambiente digital, más específicamente en las redes sociales.

Una vez que esas imágenes y videos están online, automáticamente forman parte de la enorme red de contenido de abuso sexual infantil, y pone de nuevo en riesgo la integridad física y mental del niño o niña.

Durante estos meses, este tipo de crimen ha aumentado fuertemente en Argentina, y la cifra sigue creciendo, con cada minuto que pasa. Lo que es realmente aterrador es que es un delito que no tiene fronteras y aún hoy, muchos países no tienen ningún tipo de legislación para prevenir o castigar estos tipos de actos. Incluso en Latinoamérica, que es al momento la región más avanzada en la implementación de nuevas medidas, todavía estamos aprendiendo y enfrentando desafíos.

No hay duda que este problema tiene que ser parte de la agenda en todos los países, pero especialmente en aquellos que todavía no hay implementado legislación para traer justicia a las víctimas, y evitar que esto ocurra.

Por otro lado, me parece importante resaltar la labor de las ONG, las cuales pueden ayudar a minimizar este problema en muchas maneras, como trabajando activamente el tema y trayendo conciencia a los gobiernos para que ingresen nuevas leyes en la agenda.

Me pareció importante destacar que las ONG, hoy tienen un rol clave en la sociedad y las animé a que expongan este problemas a los gobiernos y lleven conciencia a las nuestras comunidades. Este esfuerzo no solo ayudará a prevenir estos actos horribles, sino también poner presión en nuestros gobiernos para que modifiquen la legislación, y así asegurar justicia a todas las víctimas.

Enfatizando en el papel de los gobiernos, he recalcado que debemos llamar su atención, ya que es su responsabilidad enseñar no solo a los niños y niñas sobre este problema, sino a los padres y madres, así ellos y ellas pueden compartir este conocimiento con sus hijos y prevenir que sean expuestos a este tipo de peligro. Que se corra la voz del concepto de privacidad y de prevención del abuso cibernético. El mundo ha cambiado y seguirá cambiando. Hoy un niño solo o una niña sola en su habitación, jugando con su computadora o PlayStation -que también es online-, sin la correcta educación digital o supervisión, no está más seguro o segura. La información es libertad, la privacidad también.

El crimen cibernético, organizado o no, no tiene límites y se expande rápido. Por eso necesitamos un mundo unido, con colaboración internacional y comunicaciones fluidas en el tema. La cooperación internacional es clave.

Me parece importante hacer notar que mientras puede leerse esta nota hay muchísimas personas en Internet distribuyendo y consumiendo contenido de abuso sexual infantil, y las víctimas son cada vez más y más jóvenes. Necesitamos estar comprometidos, necesitamos su ayuda para frenar esto, necesitamos empezar a trabajar en una campaña que informe sobre el acoso sexual de menores online en todos los niveles.

Finalmente me pareció muy importante restacar que “el contenido de abuso sexual infantil no es pornografía infantil”:

“La pornografía infantil no existe ya que las actividades sexuales forman parte del mundo adulto y se deberían dar con consentimiento de todas las partes. El contenido de abuso sexual infantil no se parece en nada a eso, es el sufrimiento y el daño a menores de edad, y referirse a esto de la manera incorrecta, continúa lastimando la integridad de los niños y niñas una y otra vez”.

Finalmente, los niños y las niñas son la parte más valiosa de la sociedad, y es nuestro trabajo hacer todo en nuestro poder para asegurarles un mundo mejor y más seguro. Así que hagámoslo.

Notas

[1] La Revista de Derecho Penal y Procesal Penal de la CABA tiene el orgullo de publicar esta ponencia de la Sra. Juez Dra. Natalia M. Molina, que expuso el 23/09/2020 como representante de la República Argentina en “La Conferencia de la AGNU 2020: Cinco años de acción hacia los ODS”, que se organizó al margen de la 75ª sesión de la Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas. La conferencia está organizada por la Fundación de Periodistas y Escritores/as (JWF), en asociación con los/as Socios/as Globales de JWF, los Estados Miembros de las Naciones Unidas, los órganos y agencias de las Naciones Unidas, y las organizaciones de la sociedad civil de todo el mundo.
[2] Abogada (UNLZ). Posgraduada en Derecho Penal (UP). Diplomada en delitos del Crimen Organizado (USI). Expositora, miembro y, actualmente, vicepresidenta 2da de la Asociación Internacional de Mujeres Jueces (IAWJ). Jueza del Juzgado Penal, Contravencional y de Faltas 08 de la CABA. Coautora del Código Procesal Penal de la CABA Comentado, Editorial Hammurabi, publicado en el mes de junio del año 2017, en el que introdujo la no revictimización en la etapa de juicio. Miembro y coordinadora de la Comisión Redactora para el Protocolo de Implementación de la Ley N° 27.447, sobre ablación de órganos, en el ámbito de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, y coordinadora general en las capacitaciones de dicha temática. Autora y coautora de diversos artículos en revistas de Derecho Penal.